Prepárate hoy, paga después: una startup quiere cambiar el paradigma de la educación superior

Una startup con sede en San Francisco quiere reimaginar la educación superior ofreciendo una alternativa a la universidad libre de deudas y con tan solo 1 año de duración. 

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La educación superior se está enfrentando a muchos desafíos, uno de los más críticos que enfrenta es la deuda que los estudiantes tienen que liquidar después de graduarse. Con el costo de la matrícula en aumento y el valor del grado universitario en decaimiento (sólo el 18% de los estudiantes que comienzan una licenciatura terminan en 4 años), cada vez menos estudiantes creen que una educación universitaria vale la pena el costo.

Una startup con sede en San Francisco quiere reimaginar la educación superior ofreciendo una alternativa a la universidad libre de deudas y con tan solo 1 año de duración. MissionU es un programa que ofrece «una educación de clase mundial que prepara a los estudiantes para los trabajos de hoy y mañana» sin cobrar por adelantado. 

MissionU solo recibe dinero una vez que los estudiantes tengan un trabajo con un salario de al menos $50,000 dólares. El programa funciona así: los estudiantes aportan el 15% de sus ingresos durante 3 años después de que termine el programa.

Después de fundar Pencils of Promise, una organización sin fines de lucro que ha construido más de 400 escuelas en todo el mundo, Adam Braun, CEO y co-fundador de MissionU, decidió cambiar el paradigma de la educación superior después de presenciar la lucha de su esposa para pagar más de $100.000 en préstamos estudiantiles. «La deuda estudiantil es la única deuda de los Estados Unidos que no puede ser descartada a través de la bancarrota. Está contigo para siempre», escribe Braun en el sitio web de MissionU.

A diferencia de las universidades tradicionales o las escuelas en línea, MissionU fue diseñada para «habilitar» a los estudiantes a través de un programa inmersivo, colaborativo y acelerado donde los estudiantes ponen en práctica lo que han aprendido trabajando en proyectos reales. 

A pesar de que MissionU no tiene un campus tradicional y la mayoría de sus cursos son en línea, los estudiantes están obligados a vivir a menos de 50 millas de la ciudad base del programa para atender reuniones ocasionales.

Además, MissionU cree que el compromiso de una universidad con sus alumnos no debe terminar en la graduación. Los estudiantes cuentan con un programa de apoyo de seis semanas de duración que les ayuda a pasar el proceso de entrevistas a través de capacitación, orientación y negociación salarial.

La primera generación de MissionU iniciará clases a partir de septiembre de 2017 en San Francisco, California y se centrará en análisis de datos e inteligencia de negocios. De acuerdo a Campus Technology, de 4,500 solicitantes, la primera generación admitió a tan sólo 25 estudiantes. Las solicitudes para enero del 2018 ya están abiertas.

Este artículo del Observatorio del Instituto para el Futuro de la Educación puede ser compartido bajo los términos de la licencia CC BY-NC-SA 4.0