Fatima Alleyne: la dualidad de una mamá ingeniera

Como ingeniera y madre de cuatro, la doctora Fatima Alleyne cuenta sus experiencias a lo largo de su carrera, donde debe su éxito al balance familiar y laboral.

Fatima Alleyne: la dualidad de una mamá ingeniera
Foto: Dr. Fatima Alleyne / UCBAC – University of California Black Administrators’ Council
Una lectura de 7 minutos

En el marco del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia (11 de febrero) y el Día de la Mujer (8 de marzo), me pareció importante conmemorar ambas fechas a través de las experiencias de la doctora Fatima Alleyne, quien representa un gran ejemplo a seguir para muchas mujeres en este campo. Durante la conferencia WEEF & GEDC 2023 llevada a cabo dentro de las instalaciones del Tec de Monterrey, la doctora Alleyne fungió como panelista, sus palabras acerca de las mujeres en el mundo de la ingeniería no solo me sorprendieron, sino que también me conmovieron e inspiraron al conocer su trayectoria: además de ser una mujer con una gran carrera en el área de ingeniería, es madre de cuatro hijos y cuenta con su propio negocio.

Con su agradable y alegre presencia, en combinación con un enfoque seguro y determinante en su carrera, Fatima también es una madre quien debe su éxito a la priorización de su familia y contener el equilibrio entre esta y su trabajo.

La doctora Alleyne cuenta con una gran trayectoria dedicándose al sector educativo desde el nivel preescolar hasta el universitario, así como su labor en instituciones educativas sin fines de lucro. En el 2013, se convirtió en la primera mujer afroamericana en graduarse con un doctorado en Ciencias de Materiales e Ingeniería en el College de Ingeniería en la Universidad de Berkley; más adelante, en el 2018, fue presidenta (y la primera persona afroamericana en ser seleccionada para el puesto) del consejo de Educación de Contra Costa County. Actualmente, Fatima tiene su propia consultora, BeyondDEIBA, la cual se dedica a apoyar a distintos tipos de instituciones a integrar valores de equidad, diversidad e inclusión en su identidad.

La doctora manifiesta que, como mujer afroamericana, su trabajo se inspira en abrir las puertas de la educación a toda persona sin importar su raza y antecedentes, obstáculos que Fatima tuvo que enfrentar en los inicios de su vida estudiantil, los cuales pueden ser sumamente desalentadores. Sin embargo, las palabras que le inculcó su abuelo han sido propulsores que la han ayudado a cursar estudios más avanzados y tener una carrera exitosa: “Pueden quitarte todo, pero nunca podrán quitarte tu educación”.

“Quería crear experiencias para todas aquellas personas que no tuvieran acceso a ellas. No quería que otras personas, sin importar si son latinos, indios o afroamericanos experimentaran lo que yo experimenté en su tiempo. Quiero que las personas experimenten la diversidad, pertenencia y acceso. Es por eso que escogí este camino”.

– Fatima Alleyne

Alleyne tuvo a sus cuatro hijos mientras era estudiante y atravesaba etapas críticas de su vida académica. Fue durante esa etapa donde recibió fuertes críticas de personas cercanas, familiares y compañeros de la facultad, al “no estar completamente comprometida con su carrera al tener hijos”. Esto hizo que Fatima cuestionara el camino que ya había visibilizado, en donde el nacimiento de sus hijos significaron desvíos significativos, ya que su vida cambió por completo.

No obstante, la doctora remarcó que fue clave no dudar de sí misma y no ceder ante lo que otras personas definen como un obstáculo o algo no tradicional. “Yo escojo hacer ambas cosas y escojo hacerlo a mi manera”, dice Fatima. Las incomodidades de otras personas no deben impactar la manera en que una persona quiera alcanzar sus metas y aspiraciones; así como “no dejar que otras personas definan quien soy porque no están de acuerdo con mis decisiones”.

La dualidad de una vida profesional y familiar

No todos los ambientes laborales favorecen el hecho de ser mujer ni a la maternidad. Durante las muchas experiencias que vivió a lo largo de su carrera, Fatima pudo trabajar en ambientes tanto agradables como hostiles. La ingeniera platica que al trabajar en estos puestos de trabajo, lo más difícil de superar, además de soportar todas las injusticias, discriminación, racismo e inequidad a la que se enfrentaba, era estar tan consumida en estos sentimientos negativos que era inevitable llevarlos a casa. Estos empezaron a afectar tanto sus relaciones familiares, a tal grado que estuvo a punto de divorciarse; y es allí donde se da cuenta que algo debe de cambiar. Con el apoyo de su esposo, pudo solucionar sus problemas y seguir adelante firmemente hacia sus metas; dándose cuenta de todo aquello que considera invaluable. “Mi esposo quería que fuera la mujer que sabe que soy y no quería que las oportunidades laborales se llevaran tanto de mi. Decir no también es parte de ello, y apegarse a lo que realmente te hace feliz”.

La doctora relata que, durante estos tiempos difíciles, la reacción de su cuerpo ante estas situaciones le servía como recordatorio de lo que estaba atravesando. Su bienestar social, emocional y mental se vio afectado, por lo que es importante estar atento a las señales que da el propio cuerpo. Es importante reconocer no solo aquellas respuestas que te dan felicidad, sino aquellas que también te dañan, por ejemplo: presión sanguínea alta, ansiedad, depresión, etcétera. De igual manera, fue después de pasar por varios lugares de trabajo hostiles que también tuvo que trabajar en ella misma y apoyarse con un terapeuta para superarlo.

Para ella, al ser madre e ingeniera, es esencial poder hacer la distinción entre trabajar en el mundo laboral y maternar. Por un lado, ser la madre de tus hijos es un cargo irremplazable. Por el otro, en el entorno laboral eres reemplazable, al día siguiente de haber fallecido ya estará el anuncio de que se requiere a una persona que cubra tu puesto; esto definitivamente no es opción en el caso de una familia.

Fatima piensa que se deben establecer límites para que la vida profesional no intervenga con la personal y viceversa. El entorno laboral debe cambiar con el fin de darle valor a la persona por sus experiencias y habilidades, y no por su vida personal. “El ámbito laboral debe reconocer que para mí como mujer, mi prioridad es mi familia. Y debe comprender que este es un lugar que me brinda la oportunidad de generar ingresos y crear un impacto positivo en la empresa donde trabaje para así poder apoyar a mi familia”.

Sin embargo, Fatima remarca que no en todas las situaciones laborales donde una madre tiene que trabajar es fácil decir no. En el 2023, según datos del INEGI, 7 de cada 10 madres mexicanas fueron económicamente activas, por lo que para muchas de ellas no es opción negarse a una oportunidad laboral o renunciar a su trabajo actual dada la necesidad económica para sustentar a su familia, aún menos si son madres solteras.

Entonces, bajo estas circunstancias, ¿a qué puede recurrir una madre si no puede dejar fácilmente su trabajo? La doctora recomienda dejar de lado la timidez y conectar con otras personas. Ya sea desde comer junto a un compañero de trabajo en la hora de descanso hasta unirse a grupos sociales que ofrezcan clubes o clases de algún tema de interés. Incluso salir a caminar sin un horario fijo en específico por algún parque sería no solo importante para conocer a otras personas, sino para activarse físicamente.

“Lo que he aprendido es que tengo tantos talentos, habilidades y experiencias que no tengo que contenerme a mí misma y puedo definir yo misma quién soy”.

– Fatima Alleyne.

Expandir tu network (red) es esencial, asistir a conferencias, contribuir a una organización sin fines de lucro para contrarrestar la negatividad de tu trabajo actual… crear un espacio para hacer brillar tus talentos y capacidades atraerán cosas positivas: ya sea conocer a alguien que pueda dirigirte a un nuevo empleo o la satisfacción de hacer un impacto positivo para sí mismo o en otros. 

Otra manera que puede realizarse remotamente es mantener el curriculum actualizado e interactuar frecuentemente con plataformas digitales de empleo tales como LinkedIn, Indeed, entre otras. Conectar (ya sea de manera presencial o en línea) es clave para conseguir una nueva oportunidad donde puedan mejorar las condiciones de trabajo de una madre, tanto para beneficiar el cuidado de su familia así como para elevar sus talentos en el ámbito laboral.

La entrevista se llevó a cabo en una sesión a través de videollamada.
La entrevista se llevó a cabo en una sesión a través de videollamada.

Ser madre: un cúmulo de habilidades para el ámbito profesional

A diferencia de lo que comúnmente se ve como la norma en el ámbito profesional, ser madre viene con una gran variedad de competencias, mismas que deberían ser tomadas en cuenta al aplicar a un empleo, en vez de ser menospreciadas. La más importante es lo que Fatima denomina como code-switching, el cual consiste en adaptarse rápidamente a diferentes entornos. Más que un déficit, es una cualidad. Una madre debe dividirse en diferentes trabajos para sustentar a su familia: administradora de tiempo y organización, planeadora de eventos, chef, educadora… todas estas capacidades son competencias que algunos empleadores han denominado como un déficit. “El code-switching es para mi una oportunidad para crear un espacio seguro para mí misma. Ser versátil para poder adaptarme a cualquier entorno es una habilidad, la cual es necesaria. No es un defecto, es una competencia. No todas las personas pueden adaptarse a diferentes ambientes”.

Las aptitudes académicas de la doctora son un valioso ejemplo para poder visualizar mejor lo anterior: es una ingeniera profesional especializada en diversidad, equidad e inclusión, así como especialista en educación, abogacía, escritura de políticas, prácticas éticas y desarrollo de liderazgo. Cada una de esas competencias han podido entrelazarse en sus diferentes empleos, lo que ha aprendido como educadura, ingeniera e investigadora han sido conocimientos valiosos que ha podido transferir en diferentes escenarios. Lo mismo puede decirse de las destrezas que desarrollan las mujeres al ser madres en sus hogares.

“Como madre hago muchos trabajos. Soy un chofer, una tutora. Lo hago todo, ¿qué no puedo hacer?”

– Fatima Alleyne.

Los roles de género que se han impuesto a lo largo del tiempo obstaculizan las barreras internas de muchas mujeres, así como reforzar su síndrome del impostor. Fatima platica que, como ingeniera, también dentro de su propio hogar a veces espera a que su esposo realice ciertas tareas que son consideradas «solo para hombres»: realizar renovaciones en su hogar, arreglar una falla del automóvil, entre otros. No obstante, al darse cuenta que tiene las aptitudes necesarias para llevar a cabo una tarea en específico, las realiza sin importar los roles que ha impuesto la sociedad. En este caso, también sus competencias en ingeniería se pueden ver aplicados en el hogar… ¿por qué no pudieran hacerse al inversa, aplicar los conocimientos hogareños para impulsar la carrera profesional de las personas?

Ser madre no debe obstaculizar las metas académicas y laborales de las personas. Fatima es el vivo ejemplo de ello, en donde ha logrado recorrer diferentes entornos en donde ha podido brillar por sus experiencias y competencias; en donde el ser mamá no significa un impedimento, sino una capacidad más para salir adelante y triunfar en su carrera profesional.

Finalmente, la Dra. Fatima Alleyne nos aconseja: “Sé fiel a ti misma. Cree que tú, como persona, traes contigo valor, pericia y cualidades a todo lo que hagas y no todas las organizaciones, compañías o negocios a las que te unas son dignos de tu talento. Escógete siempre a ti mismo, tu salud, tu bienestar y decide si quieres adaptarte y ser flexible”.

Este artículo del Observatorio del Instituto para el Futuro de la Educación puede ser compartido bajo los términos de la licencia CC BY-NC-SA 4.0