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La invasión iniciada por Rusia el 24 de febrero de 2022 no solo propició un movimiento de tropas y conflictos bélicos en esa región, sino que dejó un futuro incierto para muchos en Ucrania.
En materia educativa, este conflicto armado ha propiciado que la “nueva normalidad”, creada por la pandemia por COVID-19, tenga una nueva disrupción en sus filas: la guerra.
Estadísticas de la educación en la guerra
De acuerdo con la UNICEF, más de cinco millones de niños se han visto afectados por los recientes conflictos en la región. Mientras que la UN Refugee Agency reporta que, hasta el 11 de julio de 2023, hay más de seis millones de refugiados provenientes de Ucrania en el mundo, incluyendo estudiantes y profesores.
Por su parte, el Ministerio de Educación y Ciencia de Ucrania reporta que la situación educativa en Ucrania ha sido desalentadora, puesto que solo un tercio de los estudiantes de nivel básico atendieron clases en 2022.
Aunado a esto, los bombardeos y ataques incesantes en muchas regiones de Ucrania no han discriminado entre objetivos militares y civiles, dejando una devastadora realidad para la población ucraniana:
Las adversidades y el acceso a la educación
La educación en muchas regiones de Ucrania (aunque preparada por la pandemia por COVID-19) ha tenido que adaptarse a las diversas circunstancias que rodean la situación de la región. A nivel superior, por ejemplo, las clases han pasado a ser totalmente en línea, a excepción de las materias prácticas, las cuales se han tenido que tomar en zonas seguras o en algunos refugios que ciertas universidades albergan.
Apagones, inseguridad, escasez de recintos educativos en buenas condiciones, conexiones inestables de Internet debido a bombardeos y ataques rusos han propiciado estragos en vastas regiones de Ucrania, por lo que el acceso a la educación en sus diversos niveles se ha visto afectada.
No obstante, organizaciones como la UNICEF, UNESCO, Google, Microsoft, LEGO Foundation, entre otras, han sido clave para restablecer y continuar con las labores educativas en la región, ya que han abastecido de materiales educativos y apoyo psicosocial, asegurando el acceso a la educación formal y no formal.
La educación en línea como vía alterna
El esquema educativo en Ucrania se ha mantenido gracias a las modalidades no escolarizadas o híbridas, sin embargo, esto no ha sido una tarea fácil.
La educación preescolar y primaria ha sido de las más afectadas, ya que muchas familias o tutores han decidido no mandar a sus hijos a las escuelas debido a las condiciones persistentes de la guerra. Esto ha provocado que más de 1.9 millones de niños estudien en línea, y que 1.3 millones hayan optado por un esquema híbrido.
La educación superior, siguiendo el mismo esquema de otros niveles educativos, ha optado por sistemas no escolarizados o híbridos, con la diferencia de que existe más flexibilidad. En este sentido, tienen plazos de entrega que no son restrictivos (más relajados), así como la opción de estudiar los contenidos de manera asíncrona.
La resistencia por la educación
Aunque el panorama parece desalentador en muchos sentidos, los esfuerzos por tener acceso a la educación persisten. Países aledaños como Bulgaria, República Checa, Polonia, Eslovaquia, Estonia, Letonia, Lituania, entre otros, han ofrecido ayuda, asistencia y protección. Otros países como Bielorrusia, Rumanía y Hungría reportan que muchos de los refugiados se han inscrito a instituciones educativas de su región, así como a cursos y talleres de formación profesional para que continúen preparándose.
En concreto, más de 100 universidades del Reino Unido se han unido para apoyar la educación universitaria en Ucrania, esto mediante el programa UK-Ukraine Twinning Initiative, coordinado por Cormack Consultancy Group y el presidente de la Educación, la Ciencia y los Deportes de Ucrania.
El anterior, se basa en un modelo de cooperación entre universidades para proveer asistencia y educación a través de diversas actividades, por ejemplo, programas de becas, dobles titulaciones, programas de movilidad, preservación de archivos o artefactos culturales de Ucrania en Reino Unido, así como compartir recursos académicos y bases de datos, así como experiencia técnica para áreas del conocimiento que lo requieran (p. e. medicina).
De esta forma, universidades de todo el mundo se han sumado con diversos apoyos, los cuales abarcan desde salud mental y bienestar hasta los de índole financiera (captación de recursos, alojamiento, inscripciones gratuitas) y académica (orientación y becas). Todo esto para apoyar a estudiantes ucranianos de nivel superior que quieran continuar con sus estudios.
El Ministerio de Educación y Ciencia de Ucrania publicó recientemente una iniciativa llamada School, We Are Together!, enfocada para la educación secundaria. Este proyecto prioriza la construcción de nuevos albergues en las escuelas, así como la reconstrucción de los inmuebles educativos; impresiones de libros de texto (según sean las necesidades), suministros para asegurar el aprendizaje (materiales educativos, laptops, tablets, etc.), así como el desarrollo de un programa para evitar más rezago educativo, e iniciar procesos desburocratización en las escuelas.
Del mismo modo, se han sumado más iniciativas para restaurar la educación por parte de marcas renombradas a nivel global. Tal es el caso de LEGO, el cual mediante su LEGO Foundation ha distribuido 300 computadoras portátiles a instituciones educativas en Ucrania para asegurar la continuidad de la educación en línea. Asimismo, se han aliado con el Ministerio de Educación y Ciencia de Ucrania para lanzar un módulo de salud mental y apoyo psicosocial, el cual está dirigido a maestros de preescolar y primaria. Por último, Lego ha colaborado con la UNICEF en las regiones fronterizas de Ucrania para crear los Blue Dot Hubs y el Play, Learning and Parenting Center, con el objetivo de brindar auxilio y asistencia a niños y familias que lo necesiten a lo largo de las rutas principales de escape.
Por su parte, la UNESCO, en conjunto con la Coalición Mundial de la Educación, Google y Microsoft, han recaudado 51 millones de dólares en materiales y efectivo para apoyar la educación en Ucrania. Google ha donado 50,000 Chromebook, mientras que Microsoft les ha proporcionado a docentes y estudiantes el acceso gratuito a un programa informático para que puedan utilizarlo, ya sea en línea o fuera de ella. Este programa beneficiará a más de 350,000 niños en regiones del sur y este de Ucrania.
¿Cómo podemos ayudar?
Para las ONG interesadas, representantes de empresas, organizaciones benéficas, así como personajes importantes dentro de la opinión pública, en la página oficial del Ministerio de Educación y Ciencia de Ucrania se pueden encontrar diversas formas de apoyar y formar parte de la causa educativa en la región.
También se pueden hacer donaciones directas en la página oficial de recaudación de fondos para Ucrania, llamada UNITED24, la cual es una iniciativa de diversas organizaciones benéficas, socios donantes y figuras públicas, tales como el actor Mark Hamill, el presentador Bear Grylls, el astronauta Scott Kelly, y el premio Nobel de Fisiología y Medicina Paul Nurse, entre otros. De tal modo que se logre asistir a Ucrania en diversas áreas: defensa de Ucrania, ayuda humanitaria, servicios médicos, para reconstrucción, así como para la educación y la ciencia.
Además, no solo se puede apoyar donando directamente, sino participando en los proyectos de los embajadores de la plataforma, tal es el caso de Game4Ukraine, en donde se puede comprar un boleto para ver un partido de futbol, en el estadio Stamford Bridge, casa del FC Chelsea, a beneficio de la causa ucraniana.
Aunque el conflicto bélico aún persiste, la educación en Ucrania ahora puede ver un rayo de esperanza gracias a la cooperación internacional de organizaciones y tomadores de decisiones. Ahora más que nunca se les agradece y reconoce a todos aquellos héroes que no llevan una capa, y que incesantemente trabajan por el futuro de la educación en Ucrania.
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Este artículo del Observatorio del Instituto para el Futuro de la Educación puede ser compartido bajo los términos de la licencia CC BY-NC-SA 4.0 
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