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El Día Internacional del Hombre (19 de noviembre) es una propuesta que nace en 1992 por Thomas Oaster, profesor de la Universidad Missouri-Kansas, con la finalidad de poner sobre la mesa seis ejes principales de trabajo:
- Promover modelos masculinos positivos: hombres de la vida cotidiana.
- Celebrar las contribuciones positivas de los hombres a la sociedad, comunidad, familia, matrimonio, cuidado de infancias y el medio ambiente.
- Centrarse en la salud y el bienestar social, emocional, físico y espiritual de los hombres.
- Poner de relieve la discriminación contra los hombres que ejercen el cuidado, buen trato y promueven prácticas y relaciones igualitarias libres de violencia hacia las mujeres y otras poblaciones.
- Mejorar las relaciones de género y promover la igualdad de género.
- Crear un mundo más seguro y mejor, donde las personas puedan estar seguras y crecer para alcanzar su pleno potencial.
Se visibiliza internacionalmente desde 2012 por la Organización Panamericana de la Salud en colaboración con la Organización Mundial de la Salud. Actualmente, las reflexiones alrededor de las “formas de ser hombre” se escuchan cada vez en más espacios, como los universitarios. Por ejemplo, la mirada feminista cuestiona no sólo el hecho de ser hombre sino cómo se construye la masculinidad, como un elemento nato de los varones y que representa una serie de valores y atributos como son: fortaleza física y emocional; autosuficiencia; rigidez; heterosexualidad obligatoria y homofobia; hipersexualidad; agresión y control.
Características de una masculinidad hegemónica producto de un sistema patriarcal que pondera estas como deseables, pero que además se exigen a todas aquellas personas a quienes se nos asignó el sexo “hombre”. Sin embargo, estas formas de socialización que aprendemos y aprehendemos los hombres tienen consecuencias que, de acuerdo con Kauffman, va en tres sentidos: hacia las mujeres, niñas, niños y adolescentes; hacia otros hombres y; hacia nosotros mismos.
Algunas consecuencias de esta masculinidad se encuentran en situaciones como un mayor índice de suicidios en hombres; muertes asociadas al uso de la violencia, homicidios, asumir riesgos; mayor consumo de sustancias como alcohol y drogas; pocas prácticas de autocuidado de la salud física y emocional.
El Día Internacional del Hombre es una buena oportunidad para iniciar con tan importante reflexión ya que no se trata de celebrar el hecho de ser hombre, sino de reflexión y deconstrucción de los privilegios en torno a las masculinidades. De tal manera que desde el Centro de Reconocimiento de la Dignidad Humana te invitamos a promover espacios seguros y dignos para todas las personas que integramos la comunidad Tec. Te invitamos a la reflexión y al cuestionamiento en este día.
Si deseas conocer más información sobre las acciones para promover espacios incluyentes, con enfoque de género y dignidad humana dirigidas a hombres, acércate a la Coordinación del CRDH de tu campus o área LiFE.
Daniel Mata es licenciado en Psicología por la UAM, unidad Xochimilco y maestro en Psicología de la Salud por la Universidad de Guadalajara. Cuenta con experiencia en instituciones públicas y privadas en el trabajo con perspectiva de género desde el enfoque de las masculinidades en el área de capacitación en prevención de la violencia de género, masculinidades, además de experiencia en atención a hombres generadores de violencia. Actualmente se desempeña como Coordinador de la Oficina de Atención del Centro de Reconocimiento de la Dignidad Humana, campus Guadalajara.
Contacto: d_mata25@tec.mx
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Este artículo del Observatorio del Instituto para el Futuro de la Educación puede ser compartido bajo los términos de la licencia CC BY-NC-SA 4.0 
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