¿Cómo aplicar la agencia de cambio desde la enseñanza? Dos ejemplos de buenas prácticas educativas

La Guía de Buenas Prácticas Educativas de Ashoka para líderes educativos inspira la implementación de nuevas metodologías para el aprendizaje. Las herramientas que la componen surgen de personas que promueven la empatía y la agencia de cambio en su quehacer diario, ¿cómo lo hacen estas iniciativas?

¿Cómo aplicar la agencia de cambio desde la enseñanza? Dos ejemplos de buenas prácticas educativas
Foto: Ashoka – Portal: http://bit.ly/BuenasPracticasEducativas
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La organización internacional conocida por impulsar el emprendimiento social y la agencia de cambio, Ashoka, en alianza con la Fundación MetLife, compartieron con personas líderes en educación su Guía de Buenas Prácticas Educativas a partir de la necesidad de transformar la manera en que se enseña. Su esencia radica en propiciar un entorno que favorezca y priorice el aprendizaje que genere cambios de impacto positivo en la sociedad. 

Con el propósito de brindar acceso a herramientas educativas que han sido puestas en práctica y son replicables, se espera que desde la educación formal y no formal puedan integrarse las habilidades transformadoras: empatía, trabajo colaborativo, liderazgo compartido y creatividad para solucionar problemas. 

La guía está compuesta por ocho modelos educativos inspiradores, de los cuales se derivan dinámicas y metodologías que sirven de ejemplo para integrar nuevas formas de enseñanza que promueven la agencia de cambio y permiten desarrollar estas competencias. 

Dentro de esos modelos educativos inspiradores se encuentran Prepa UMA y Peraj, que desde sus innovaciones generan en las y los jóvenes un pensamiento multidimensional y crean comunidades de aprendizaje. 

Prepa UMA, forjando la empatía desde el autoconocimiento

La preparatoria de la Universidad del Medio Ambiente (UMA) tiene como objetivo formar con las y los estudiantes una comunidad de aprendizaje de educación media superior que les inspire a ser «personas conocedoras, sensibles, creativas, críticas y autónomas, comprometidas con una transformación colaborativa de la realidad hacia la sustentabilidad socioecológica». Actualmente, la prepa tiene 57 estudiantes que sumarán a los más de 79 egresados.

UMA es la única universidad en México, América Latina y el Caribe que se dedica a la regeneración y a la sostenibilidad, por tanto, en Prepa UMA el desarrollo de habilidades de agencia de cambio permea en su programa educativo. De esta manera, los estudiantes se preparan desde el autoconocimiento para sumarse a la transformación socioambiental al comprometerse con el cuidado del otro, de su entorno y del medio ambiente. 

Además de incluir todas las asignaturas de la Dirección General del Bachillerato, la preparatoria cuenta con un tejido de estrategias y metodologías que conducen al desarrollo de competencias de pensamiento multidimensional. Para impulsar la dimensión crítica de los estudiantes, ésta se construye por medio de la conceptualización propia de fenómenos o elementos, así como por la exploración de valores entre pares. 

Uno de sus distintivos son las cuatro estrategias pedagógicas que implementan: investigación activa, convivencia en comunidad, comunicación y producción y educación. De las primeras dos líneas formativas se derivan las cuatro herramientas que comparten en alianza con Ashoka. 

La primera herramienta es la asamblea de estudiantes, un espacio donde los estudiantes  pueden entrenarse en  sus primeras prácticas democráticas, además de que permite la autogestión ya que se constituyen como sujetos autónomos. Los estudiantes aprenden sobre qué significa colaborar y proponer, desde la agencia de cambio. 

La asamblea funciona con un órgano de gobierno donde existen coordinadores y los representantes de comités que  se eligen a través de una votación. Entre los roles se encuentra el coordinador general, quien organiza a los coordinadores, también están los coordinadores de cada año de preparatoria. Igualmente, hay comités que se aseguran del funcionamiento adecuado de la escuela como el de Asistencia y Mantenimiento, el Disciplinario y el Académico. 

Cada viernes se llevan a cabo sesiones de asamblea en plenaria y una vez al mes hay una sesión en un taller de codiseño con el claustro de docentes. De esta forma, en lugar de contar con un consejo técnico donde profesores y profesoras revisan el trabajo, los talleres de codiseño posibilitan una conversación horizontal sobre lo que funciona y lo que no respecto al aprendizaje, a la vez que se brindan sugerencias y todas y todas asumen la responsabilidad del aprendizaje. Este tipo de actividades favorece el liderazgo colaborativo. 

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La metodología de tutoría entre pares que implementa Prepa UMA conlleva aprendizaje contextualizado, donde los estudiantes de segundo y tercer año acompañan a los de primero en su proceso de integración a la preparatoria centrándose en apoyar el desempeño académico, pero también en su bienestar emocional. Cada viernes se reúnen dentro del horario escolar para que el tutor escuche y ayude desde su experiencia, además se encarga de proveer una agenda para la semana. 

La atención a situaciones académicas y socioemocionales dentro y fuera del espacio educativo contribuye a desarrollar un proceso de metacognición en los tutores. Esta herramienta es efectiva porque al hacer aprender o reaprender a otra persona el tema, se aprende perfectamente lo que se tenía que entender. Este tipo de actividades facilita el trabajo colaborativo. 

Para conocer una guía de cómo emplear este ejercicio, da clic en la siguiente ficha.

Los proyectos comunitarios regenerativos permiten sentar las bases para trazar con la comunidad un proyecto que mejore las condiciones del entorno, y además que sea sostenible a través del tiempo como parte de una regeneración permanente. Los estudiantes son conscientes del mundo alrededor e interpretan lo que observan, con un aprendizaje interdisciplinario, pueden proponer una mejora para potencializar el bienestar de los beneficiarios de los proyectos. 

En la preparatoria, los estudiantes están preparados para identificar una problemática, generar una hipótesis e involucrarse en diferentes contextos. Después de la etapa donde existe una inmersión con un ambiente en específico para propiciar aprendizaje servicio, en el UMA Lab se formula una estrategia con el fin de implementarla y abordar una solución.

Tú también puedes abrir un espacio para plantear una respuesta a diversas problemáticas, entrando en la siguiente ficha.

La cuarta metodología que Prepa UMA comparte es el aprendizaje autodirigido, que sucede cuando los estudiantes tienen las herramientas necesarias a fin de gestionar su propio proceso de aprendizaje a través del desarrollo y la práctica deliberada de habilidades. Después de conocerse, distinguir su estilo de aprendizaje, sus hábitos, su ámbito ideal para la enseñanza, entre otros, ellos mismos diseñan su ruta de aprendizaje. Luego, las y los estudiantes se autoevalúan y replantean su método. 

Sin importar si los estudiantes se preparan para la vida o la educación superior, esta buena práctica hace su integración más llevadera. De tal manera que, aunque se enfrenten a la incertidumbre la percibirán como confortable porque reconocen qué quieren y qué necesitan para conseguirlo, asumiendo los pasos a seguir al establecer escenarios. 

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La Prepa UMA ofrece un modelo concreto para mostrar cómo desarrollar el potencial de los jóvenes como agentes de cambio desde un plan de estudios flexible. Este objetivo se cumple al integrar la empatía como elemento central en la esencia de su enseñanza. Los estudiantes que convivan y estén en contacto con la comunidad, así como los que ayuden a otros a aprender siempre deberán practicar la empatía. 

Aunque ha tenido inspiración en otros procesos y métodos para la construcción de su tejido educativo, la preparatoria ha observado, escuchado y se ha adaptado a las necesidades del estudiantado. 

«Nosotros de verdad nos sentimos muy honrados de poder compartir algo que también para nosotros nos inspiró en algún momento y que nos ha servido muchísimo en dos sentidos: en nuestra construcción como sujetos que acompañan y en ver en qué tipo de personas se están convirtiendo los sujetos a los que estamos acompañando», expresó Karina Gutiérrez, directora general de Prepa UMA. 

Para contribuir con una transformación socio ambiental, estar desvinculados de la realidad del mundo no es una opción. Por ello, poner en común estos recursos es relevante con la intención de aportar a la comunidad. A medida que se ponga al estudiante al centro del aprendizaje, se brinde la oportunidad de que tengan iniciativa en su autogestión y se escuchen sus voces, se perderá el miedo a experimentar nuevas maneras de aprender que pueden ser más efectivas para muchos. 

«Aunque nuestros egresados no se van específicamente a campos de conocimiento que tienen que ver con sustentabilidad y exploran la búsqueda de la vocación desde cualquier disciplina, estamos conscientes que sí son otro tipo de personas que ven el mundo de diferente forma, que se comportan de distinta forma y que se comprometen a colaborar desde su agencia de cambio desde otro lugar, aunque estén en contextos que a veces ya están estructurados con sistemas que no son tan flexibles», indicó Karina Gutiérrez. 

Peraj, acompañamiento para el cambio

Peraj es un programa de mentorías que involucra a jóvenes universitarios que guían a estudiantes de quinto y sexto grado de primaria en condiciones de vulnerabilidad. Durante el ciclo escolar, el acompañamiento cercano consiste en apoyo académico que ayuda a niñas y niños a aprender mejor, así como también desarrollar habilidades socioemocionales. Por medio de la creación de un ambiente seguro y al establecer relaciones interpersonales significativas, las infancias fortalecen su autoestima, competencias sociales y se motivan para alcanzar su máximo potencial.

Con más de 80 mil niños, niñas y jóvenes beneficiados, 26 estados de la república participando a lo largo del programa y 18 años de trabajo activo, la mentoría de Peraj se ha consolidado al generar relaciones positivas que fortalecen capacidades. Igualmente, los estudiantes de la universidad, desarrollan habilidades de liderazgo colaborativo que promueven el compromiso social y enriquecen su formación humana. 

Desde su inicio en 2003, Peraj ha sido adaptado a las condiciones y necesidades del país. En 2004, en conjunto con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), operó con 11 binomios en las instalaciones universitarias que sirvieron para probar y afianzar su metodología. A partir de ese entonces y hasta ahora, el programa cuenta con 37,378 binomios acumulados y apoya el desempeño académico a la vez que previene la deserción escolar. 

La base de esta iniciativa radica en la noción de que si los infantes tienen a su alrededor adultos que se preocupan e interesan por ellos, tienen mayores posibilidades de ser exitosos, continuar con sus estudios y prevenir conductas delictivas. Por tanto, el apoyo de los mentores, aunque es adicional del que brindan las familias o docentes, es importante para niñas y niños con figuras maternas o paternas ausentes, donde la madre o padre tiene poco tiempo para atenderles, existe una falta de conocimiento por parte de sus madres y padres para asistirlos, o simplemente en donde su entorno puede propiciar comportamientos negativos (drogas, delincuencia, deserción escolar, violencia). 

Los mentores se reúnen con sus estudiantes dos veces por semana, este acompañamiento está enfocado en impulsar las 12 competencias socioemocionales (habilidades transferibles) que son promovidas por la UNICEF para todos los actores involucrados. Además, los mentores reciben una capacitación continua sobre estas aptitudes en sus cuatro dimensiones: cognitiva (aprender a saber), instrumental (aprender a hacer), individual (aprender a ser) y social (aprender a vivir juntos). Durante el año, también se realizan actividades culturales o lúdicas, visitando algunos sitios de interés, con el propósito de motivar a las niñas y niños a no abandonar la escuela. 

Peraj ha contado con la colaboración de más de 90 instituciones educativas de nivel superior, con las cuales en conjunto han realizado manuales de actividades. Estas herramientas han sido replicables y buscan seguir desarrollando capacidades socioemocionales basadas en la empatía y la agencia de cambio. Algunas de ellas integran la guía de buenas prácticas educativas de Ashoka:

  • ¿Estás escuchando?: este ejercicio estimula la escucha activa para reconocer y prestar atención a las otras personas. Para saber cómo puedes practicar esta actividad entra en la siguiente ficha
  • Presentaciones: con ayuda de este recurso se genera una participación grupal que otorga la oportunidad de forjar relaciones de amistad en un ambiente seguro. ¿Cuáles son las instrucciones? Entra en la siguiente ficha para conocerlas. 
  • El papel de la mentoría en la vida: la herramienta permite legitimar a una persona mentora, al identificar las cualidades que tiene para llevar a cabo su labor, y reflexionar sobre su trascendencia. Incentiva la empatía con esta actividad entrando a la siguiente ficha
  • Juego de roles sobre comunicación: a partir de situaciones hipotéticas, podrán precisar una buena comunicación, los elementos que la integran y qué puede mejorarla. Para aplicar este ejercicio y fomentar el trabajo colaborativo, entra en la siguiente ficha

Las actividades divulgadas con Peraj para líderes de la educación están orientadas a la empatía. Si bien el mentor es el aliado principal en este proceso, también es el que sembrará la semilla de la agencia de cambio para que niños y niñas que se conduzcan a la vida laboral, desempeñen su trabajo con una visión empática y consciente de su entorno. Incluso en algunas ocasiones, son los aprendices quienes regresan a ser mentores. 

«Hay un gran trabajo detrás de cada una de estas actividades, con gente muy preparada, muy conocedora que nosotros abrimos nuestras puertas a todo mundo, a maestros, psicólogos, pedagogos, que nos han ayudado a desarrollar toda esta metodología. Siempre estamos buscando estas colaboraciones», señaló Eloísa Arango, directora general de Peraj. 

Peraj trabaja en alianza con universidades proporcionando el saber hacer, o el conjunto de conocimientos y procedimientos para aplicar el programa. Como objetivo a corto plazo busca colaborar con la UNAM para medir el impacto de su modelo. Su esfuerzo hace lo posible por aportar mejores herramientas educativas para aprender.

«El objetivo final es que transiten su vida escolar de una manera más agradable. Y cuando nosotros estamos en un ambiente agradable que nos gusta, nos sentimos motivados para llegar al final», afirmó Eloísa Arango. 

La empatía y la agencia de cambio pueden aplicarse desde cualquier espacio y contexto. Enriquecer el aprendizaje se logra al compartir experiencias y encontrar nuevas formas de enseñar, de conocer cómo aprendemos y de entendernos para escuchar y comprender a otras personas. Ashoka desde su Comunidad Colíder de Niñez y Juventud, en conjunto con la Fundación MetLife, invitan a acceder al portal de Ashoka para conocer más sobre los otros modelos y herramientas que componen la Guía de Buenas Prácticas Educativas. 

¡Súmate a una visión transformadora desde la empatía y la agencia de cambio!

Este artículo del Observatorio del Instituto para el Futuro de la Educación puede ser compartido bajo los términos de la licencia CC BY-NC-SA 4.0