Cuatro edificios modernos que mantienen vivas a las bibliotecas

Una muestra de lo que hacen las bibliotecas hoy en día para mantener vivo “el turismo del saber”.

Cuatro edificios modernos que mantienen vivas a las bibliotecas
Para perdurar, las bibliotecas deben trascender a otras formas de transmisión del conocimiento. Foto: Wikimedia Commons.
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El valor de los libros impresos es un tema altamente discutido en la era digital. En artículos anteriores hemos hablado de la permanencia de las bibliotecas y las ventajas que ofrecen los libros impresos por encima de los contenidos digitales. Dinámicas didácticas como el aprendizaje invertido y el learning commons representan nuevas aplicaciones y formas de habilitar los espacios de biblioteca como los lugares de conocimiento libre que son.

Además, existen bibliotecas que desafían los sentidos de la estética y funcionalidad. A través de su arquitectura y distribución trascienden su propósito principal y se transforman en un atractivo foco de lo que podríamos designar como el “turismo del saber”.

Estas son algunas de las más impresionantes bibliotecas alrededor del mundo.

1. Biblioteca Central Oodi, Helsinki, Finlandia.

Para concretar este proyecto, se utilizaron 68 millones de euros, parte de este presupuesto se utilizó para asegurar una locación clave frente al Parlamento Finés. Solo un tercio de los 5630 metros cuadrados del inmueble son usados para el acomodo de libros, el resto se usa para dar lugar a juntas y actividades.

En el segundo piso puede encontrarse un taller con máquinas de coser, escáners, impresoras, cortadoras lásers y estaciones de soldadura. Estos son espacios destinados a habilitar la creatividad, en ellos se puede coser, hacer placas y hasta tocar instrumentos musicales.

El recinto también cuenta con espacios para renta de empresarios y profesionales de mercados emergentes, de forma que puedan trabajar y reunirse con sus clientes de la misma forma que lo harían en un coworking.

Anna-Maria Soininvaara, directora de la biblioteca, sostiene que los turistas vienen de todo el mundo para ver la biblioteca y prefieren el “Maker Space” en el segundo piso. Aseguró también que los libros siguen formando parte importante de la experiencia:

“Los visitantes preguntan por qué nuestras repisas están medio vacías, es porque la mitad de nuestros libros siempre están prestados”.


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2. Biblioteca Nacional de Catar, Catar.

Los administradores de esta biblioteca tienen muy claro cómo mantener vigente este tipo de recintos, mediante diversas atracciones que capten turismo constantemente. La Biblioteca Nacional de Catar realiza de 80 a 90 eventos libres al mes.

Esta biblioteca fue construida no solo para representar la reverencia de todo un pueblo por el acto de aprender, sino su necesidad de reunirse y compartir ese conocimiento.

Con un techo de cristal de 21 metros, específicamente diseñado para aprovechar al máximo la luz natural, la Biblioteca Nacional de Catar manda fuerte y claro el mensaje de que el aprendizaje puede ser la luz para todos.

Cuenta también con laboratorios para escribir música, cuartos de transmisión con pantallas verdes y espacios de juegos para niños de todas las edades.


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3. Biblioteca de Tianjin Binhai, China.

Construida para el propósito práctico de dar acceso a libros y promover la lectura, la Biblioteca de Tianjin Binhai amasó la impresionante cifra de 10,000 visitantes por día durante su primera semana de apertura, en octubre de 2017. La mayoría de la gente que ingresa al edificio, no lo hace para usar sus servicios, sino para disfrutar de su fantástica arquitectura.

Sus 33,724 metros cuadrados de área están pintados de blanco, con el fin de propiciar la concentración y la oportunidad de aprendizaje. En el centro del recinto se encuentra un auditorio esférico, asimismo, las escaleras a las plantas superiores están incorporadas a las repisas. Cuenta también con dos terrazas en el techo que ofrecen una de las mejores vistas de la región.


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4. Biblioteca Tec, Monterrey, México.

El edificio de Biblioteca del Tec de Monterrey Campus Monterrey, fue premiado por el mejor diseño interior para una biblioteca académica en los premios Library Interior Design Awards, que otorga la International Interior Design Association (IIDA) y la American Library Association (ALA).

Se extiende a través de 17,300 m2 de construcción y está conformado por seis niveles. Su mayor fuerza es la flexibilidad de sus interiores, enfocados a a facilitar el acomodo de variedad de ambientes para adaptarse a cualquier necesidad de aprendizaje, además de la inclusión de espacios polivalentes y y habitaciones abiertas que habilitan la práctica de Learning Commons.

La flexibilidad de sus espacios permite el acomodo de una gran variedad de ambientes para mejorar la experiencia del aprendizaje.


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Es cierto que el libro físico ya no es el único medio para registrar y comunicar el conocimiento a millones de personas, y las bibliotecas tampoco son el lugar exclusivo donde este conocimiento puede obtenerse, sin embargo, esto no quiere decir que hayan dejado de ser útiles en el proceso de aprendizaje.

Las bibliotecas que perduren serán aquellas que incorporen diversas formas de comunicación, creatividad, aprendizaje y comunidad, justo como lo hacen las mencionadas en esta lista, comprobando una vez más que las bibliotecas no están acabadas, solo cambian de forma.

Este artículo del Observatorio del Instituto para el Futuro de la Educación puede ser compartido bajo los términos de la licencia CC BY-NC-SA 4.0