){kind=logo}
){kind=icon}
){kind=logo}
){kind=icon}
Un nuevo estudio revela las siete medidas más importantes que las instituciones deben tomar para mejorar sus programas de aprendizaje digital.
El estudio Making Digital Learning Work, publicado por Arizona State University (ASU), examina el impacto de la tecnología digital en la educación, en particular el éxito estudiantil y el retorno de inversión para instituciones y alumnos.
La investigación se centró en estudios de caso en seis instituciones de educación superior: Arizona State University, University of Central Florida, Georgia State University, Houston Community College, Kentucky Community y Technical College System, y Rio Salado Community College.
«Estas seis instituciones tienen un sólido historial de uso del aprendizaje digital para atender a poblaciones estudiantiles grandes y socioeconómicamente diversas, y cada una ha sido pionera en innovar para expandir el acceso a la educación superior, mejorar los resultados de los estudiantes y proporcionar educación a un costo accesible.»
Los investigadores se centraron en los resultados del aprendizaje digital en diferentes condiciones y con distintos enfoques. La conclusión principal es que cuando las universidades invierten en cursos de alta calidad, logran tres objetivos fundamentales:
- Resultados de aprendizaje equivalentes o mejores a los programas presenciales, mayores tasas de retención y graduación, y rutas más rápidas hacia la obtención de un título.
- Ampliar el acceso a la educación, especialmente para estudiantes desfavorecidos. Las instituciones participantes aumentaron su matrícula de estudiantes, tanto en volumen como en grupos demográficos específicos.
- Aumento de ingresos y reducción de costos operativos. Los ahorros para los cursos en línea variaron de entre $12 y $66 por hora.
El estudio identifica, además, siete prácticas prometedoras para el éxito de los programas de educación en línea:
- Adoptar un enfoque estratégico y adaptarse a las necesidades de los diferentes grupos demográficos de estudiantes.
- Concentrarse en la calidad de los recursos digitales, ya que el aprendizaje efectivo en línea depende de cursos y planes de estudios diseñados adecuadamente.
- Proporcionar orientación y apoyo a los estudiantes que sólo estudian en línea.
- Capacitar e involucrar a los docentes en los programas de educación digital.
- Construir infraestructura duradera que garantice una instrucción en línea de alta calidad.
- Elegir alianzas cuidadosamente. Las intuiciones pueden promover la innovación a través de alianzas exitosas con empresas.
- Implementar y mejorar el análisis y monitoreo de datos.
«La evidencia indica que el aprendizaje digital bien planificado y bien ejecutado puede ser enormemente valioso para las instituciones y los estudiantes. La evidencia también demuestra que cuanto más experiencia obtienen las universidades, más rápido pueden ampliar sus programas con éxito.»
){kind=icon}
){kind=icon}
Este artículo del Observatorio del Instituto para el Futuro de la Educación puede ser compartido bajo los términos de la licencia CC BY-NC-SA 4.0 
)
Fernanda Ibáñez
Fernanda Ibáñez
Fernanda Ibáñez